Frutillar es una ciudad hermosa. Emplazada alrededor del Lago Llanquihue, cuenta con una vista privilegiada de los volcanes Osorno, Puntiagudo, Calbuco y Tronador.
Su costanera es un deleite, amplias veredas para caminar, tranquilidad, areas verdes y los antejardines de hermosas casas y hoteles.
La influencia de los colonizadores alemanes en Frutillar es tan fuerte como en Puerto Varas. Se ve plasmada en su gastronomía y arquitectura. No puede dejar de comer un exquisito trozo de kuchen o almorzar en el Club Alemán, ubicado frente al lago.
La oferta de alojamiento consta de hoteles, cabañas y hostales. Destacan cálidos hoteles boutique, cabañas ubicadas frente al lago y hostales con atención de primera calidad, siguiendo la tradición de la prolijidad alemana.
Frutillar es una ciudad ideal para quienes disfrutan del paisaje y buscan un lugar tranquilo para descansar y desconectarse, "lejos del mundanal ruido".